Herpes de Colores

Herpes de Colores

De sexualidad nunca definida, o mejor dicho, constantemente redefiniéndola según su propia concepción de sí mismo y su estado de ánimo, siempre cambiantes. Pero, sobre todo, concibe al sexo sólo como una forma de auto-afirmarse e intentar amarse a sí mismo. Es vanidoso y coqueto, lo que más le gusta es verse a sí mismo haciendo el amor. Lo único que pide a su pareja sexual es la no interposición entre él y un espejo, y agradece con grandes sumas de dinero guardar la quietud y el silencio más respetuoso en el preciso momento de su orgasmo. La masturbación para él es un acto de máximo valor sagrado, es por ello que sólo se la autoriza para las ocasiones en que se siente completamente pulcro y arreglado para sí mismo. Pero es tan exigente con su propia imagen que rara vez sucede que no encuentre un bucle o una arruga que desarticule absolutamente toda su propia percepción. Pero también sucede que su propio concepto de la belleza es muy diferente a la que cualquier ser pudiera tener, incluso, su estética es horrenda para la gran mayoría de los integrantes de la comunidad bastardística.
Se arregla hasta el último cabello, ocupa toda clase de cosméticos para la piel, no deja al azar ni el más mínimo detalle de su imagen, pero todo eso sólo para recibir la sorpresa de que una vidriera o una fuente le devuelva una imagen de la cual caer irremediablemente enamorado, hecho que no ocurre casi nunca por las exigencias que tiene consigo mismo.
Trabajan en las más variadas posiciones de las empresas de belleza. Pueden ser gerente así como porteros o asensoristas. En realidad a ellos no les importa mucho la posición y el prestigio de su puesto de trabajo, lo único que desean es estar integrados a una prestigiosa empresa de artículos de belleza. Sucede a menudo que se los encuentra trabajando en talleres mecánicos, en la industria de reciclaje de basura, o en baños de los estadios de fútbol. Aquí existen dos posibilidades. La primera, es que se trate de profundos estados depresivos producto de grandes frustraciones personales, conducentes irremediablemente al suicidio. Pero también puede ocurrir, y esa es la segunda posibilidad, que, al tener un concepto de belleza tan propio y diferente al de los demás, éste sea el escenario de un Pequeño Bastardo completamente feliz y realizado. Los casos de muerte súbita reportados en ellos no deben confundirse con intentos acertados de auto-aniquilación sino que se deben a los efectos que sobre el sistema cardiaco tiene las altas concentraciones adrenérgicas proveniente del continuo orgasmo en el que viven. La necropsia es infalible para distinguir un caso del otro.